lunes, 23 de abril de 2007

Flower power


Me vas a perdonar por las disculpas, Ta ta, pero esto de un laborable con 'aroma' a festivo ¿cómo se come? Porque el aroma no será el de las rosas que se regalan... si las flores de floristería ya me dan grima de por si, estas rosas tan forzadas y tan artificiales, tan clónicas, tan engordadas con fertilizantes y floridas a base de concentrados de hormonas... uh qué penilla, me dan una sensación de pequeños cadáveres... y súmale los envoltorios de plasticos, lazos brillantes, papelitos transparentes... y mas allá de la 'clásica' rosa roja, las azules, toma ya! Y para rizar el rizo, esta mañana he visto unas multicolores, algo así como cada zona de la rosa de un color, digo yo que se lo habrán hecho a las pobres flores con esprai o algo así... ep.pantoso

Lo del libro, pues no está mal del todo pero igualmente es un poco tocabowlings que se hayan de comprar libros por ser hoy San AjoPorro. Por mi el día del libro podrían ser los 365 días del año... ¿tradiciones? para quien las quiera, pero es que cada vez son mas y mas y mas y mas consumistas. Prefiero los libros conforme me apetecen y las flores vivas; también citando a los Mojinos: 'las margaritas son flores del campo'

Y es que hay tanto
bello
por ver

3 comentarios:

  1. Me encantan las margaritas y estoy de acuerdo contigo con lo de las tradiciones, algunas de ellas inventadas por el corte inglés.

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  2. Acababa de escribir y no me ha dejado mandarlo... Otra vez a escribir jejeje Te decía que a mí tampoco me entusiasman esas fiestas sacadas de la manga donde todo el mundo tiene que comprar algo y si no es como si queda mal, yo prefiero hacerlo un día en el que la otra persona no se lo espere... Esto lo dice todo el mundo pero al final siempre acaban comprando algo...

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  3. quedas perdonada ta-ta de mis entretelas

    Si no es que defienda este tipo de celebraciones, aunque esta tiene mucha tradición y fuera del "regalo-obligado" me parece muy correcta.

    No hay pq gastarse el sueldo en la rosa más sofisticada de las ramblas, ni en el libro más gordo que jamás se va a leer (o si).

    Evidentemente, los regalos más agradecidos son los imprevistos, sin motivos externos que los contaminen.

    Saludos familia!

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