A mi tampoco me gusta especialmente Rosa Montero, pero sí este artículo suyo que he recogido en el Ni libre ni ocupado.
Me quedo sobre todo con esta frase uno no está a favor del aborto sino de su regulación legal, para no añadir más penalidades a esa pena tremenda Porque nadie, nadie en su sano juicio lo va a pasar bien abortando, es mas, es una de las peores cosas que creo que te pueden pasar. Pero es algo que existe irremediablemente, y el negarlo sólo lleva a que se produzca o en Londres con anestesia y vuelta en avión o en un tugurio, con infecciones y consecuencias mas o mas graves. No mas o menos. Mas o mas.
Y esta mierda de gobierno que tenemos que se autollama socialista, encoge el rabo entre las piernas y no coloca a los chupones de la iglesia en el sitio que les corresponde, el de una secta. Y no pone las leyes claras y firmes, como habrían de estar. Como dijo el Wyoming, ya sólo falta que para ver cine erótico nos tengamos que ir a Francia, y lo que es peor, para comprar toallas, a Portugal...
Madre superiora, bióloga, gatoflauta aspirante a vegetariana. Si quieres halagarme, llámame loca.Yo también prefiero una mariposa al Rockefeller Center. Mi hijo me ha dado la vuelta como un calcetín, y a la vez soy mas yo que nunca. Una vez me teñí el pelo: nunca volverá a suceder. No puedo ser princesa porque nací guerrera. Odio las bodas, ir de tiendas, las peluquerías y las flores muertas. Leer me salva. Cocino con el corazón, de otra forma no me sale. Sólo veo lo que creo.
El articulo salió publicado en El País y también me gustaron mucho sus argumentaciones.
ResponderEliminarEn fin, que otra más de esas cosas que no tienen ni pies ni cabeza y poco o nada podemos hacer al respecto más que acordarnos de las famílias de los políticos y no para llamarles guapos.
En mi país (Uruguay), también el gobierno es socialista. Cuando se propuso en el senado la elaboración del proyecto de ley acerca de la salud reproductiva, nuestro presidente dijo que si querían armar la ley, que lo hicieran, pero que él como presidente ¡la iba a vetar! Es lo de siempre: Si se legaliza el aborto, se van al demonio las ganancias de las clínicas clandestinas. Además, los únicos que salen perdiendo con la penalización del mismo son los que nada tienen. El resto, tiene algún dinerillo como para costeárselo. Las muertes por mala praxis, los niños que vienen al mundo en hogares en donde no se los podrá ni alimentar, ni abrigar... Pero nada de ello conmueve a la santa iglesia. Hace algunos años murió por estas latitudes una chica porque le habían practicado un aborto casero con un poderoso insecticida.
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