Quien me iba a decir a mi, cuando le compré a mi respectivo aquella camiseta tan pija, hace un par de años, que nos serviría para llevar a urgencias envuelto en ella a Pablo, que a las tres de la mañana ardía de fiebre.
Y es que mi esperadísimo fin de semana largo en Valencia, mas concretamente en Villar del Arzobispo, se ha visto agrisado por nuestro debut en las urgencias: Pablo se fue a dormir bien, como siempre, pero al despertarme y tocarlo me di cuenta de que desprendía un calor mas que importante.
Todas las cosas típicas y tópicas que siempre habia oido decir en estas situaciones (que te sientes impotente, que se sufre mucho, que te cambiarías por él...) son verdades como puños tan verdaderas como la ley de la gravedad, así que una vez mas para quienes ya lo saben por haberlo vivido en sus can.nes, pues ya lo saben, y para quienes (aun) no tienen carnecitas ajenas en que sufrirlo, pues ya lo sabrán pero yo no soy capaz de explicarlo mejor.
Por suerte Pablo no tiene ningun otro sintoma, y con el paracetamol lo va llevando. Esta mañana a las 5 tenía 37.5 y me ha dicho que el paracetamol me lo tome yo (en su idioma, lo ha devuelto junto con un poquico de leche) Yo me he quedado sin saber qué hacer en este caso, si volverle a enchufar otro jeringazo, o dejarlo estar. En vista de que la temperatura no era alta, he pensado que le aprovecharía mas a su cuerpete seguir durmiendo tranquilo (que por eso estoy yo aqui, a ver lo que duro) que someterlo a otro enchufe del liquidito, que por cierto, olerá a fresita, con perdón por el diminutivo, pero tiene un regustillo amargo que pa qué.
Así que hoy en plan preventivo nos perderemos la natación. De haberlo oido de otra persona hace un par de años, seguro habría pensado que qué exagerada, que ya ves tu, que qué le iba a pasar al niño, que qué sobreprotectora y todas esas cosas que se piensan antes de ser madre, ese periodo donde se sabe todo sobre niños, educación infantil, etc. Ahora he cambiado de opinión sobre muchas cosas, porque como dice la frase, nuestra cabeza es redonda para permitir al pensamiento cambiar de dirección, y digo yo que mas redondo todavía es el corazón
Parece que a pesar de todo lo has llevado bien, y es que yo por ejemplo me pongo muy nerviosa. Cada vez menos, pero...Qué bonito lo que has escrito al final.
ResponderEliminarCurioso que este fds los blogo-peques se hayan puesto todos malitos ¡!
Qué ha pasado este fin de semana, ha habido una epidemia? Yo no podía imaginar que se sufriese tanto en cuerpo ajeno antes de ser madre
ResponderEliminarParece que hay un virus que ha afectado a muchos bebés de blogeros! Espero que se cure pronto.
ResponderEliminarAy, qué recuerdos de mi niña malita, llevarla a urgencias y acto seguido llevarme a mí con dolor en el pecho por el stress padecido por padecer, creyendo que era un infarto. Y es que yo soy de natural "patidor" y con mi niña malita lo pasaba fatal. Y ahora ya ves, la tía con su novio por ahí!.
ResponderEliminarPor cierto, el Apiretal (se llamaba así?) de fresa está asqueroso!
Espero que ya esté bien el peque!!!
ResponderEliminarNosotras hemos necesitado poco el paracetamol (gracias a Dios y a la teta!!!) pero a la segunda vez cambié el Apiretal por supositorio, hace efecto más rápido y no lo escupe, jeje...
Ánimos!!! Besos!!!