Es la una y cuarto de la mañana y no puedo dormir, en parte porque tengo -lo que supongo que son- contracciones (de las de 'broma' que dice la comadrona) pero mas que nada porque me he ñampao una hamburguesa para cenar que como mínimo duplica el tamaño actual de mi estómago y claro, cualquiera que haya visto una camapaña de la DGT lo sabe: las imprudencias se pagan.
Hemos estado una de las tres semanas de vacaciones en un pueblo-pueblo-pueblo, de esos donde el estanco es tambien tienda, y solo hay un horno, una farmacieta, y dos bares donde se juega a cartas, la gente va a misa los domingos porque es la actividad social mas interesante de la semana, puedes comprar leche recien ordeñada de esa que los que saben ahora coinciden en que es malísima para todo, solo se ven tres canales de tv y regular, no hay cobertura de orange ni ordenadores, los tomates huelen y saben a tomate, te alegras de cenar judias verdes porque estan buenisimas, en fin...sería un contar y no parar; un sitio donde siempre que vas puedes aprender, si quieres, el equivalente a una tonelada de libros... y mas los que vivimos una vida tan loca y frenetica
En cuanto al peque, sigue "de nalgas" o sea con su cabezon donde antes estaban mis pulmones y con especial predileccion por colocarse debajo de la teta derecha. Parece ser que hay muy poquitas probabilidades de que se de de la vuelta asi que si esto sigue asi será una cesarea.
Echaba de menos escribir y saber que los cuantitos me leeis estais ahi... he pasado algunos dias pero no me apetecia escribir, y no es por dar la excusa mas mala de todos los tiempos - la falta del mismo- porque al estar bien o quiero salir y aprovechar la 'libertad' que me queda y hacer cosas, o quiero limpiar limpiar limpiar, vaya, un sindrome del nido en toda regla.
Mañana mas.
Muas
Madre superiora, bióloga, gatoflauta aspirante a vegetariana. Si quieres halagarme, llámame loca.Yo también prefiero una mariposa al Rockefeller Center. Mi hijo me ha dado la vuelta como un calcetín, y a la vez soy mas yo que nunca. Una vez me teñí el pelo: nunca volverá a suceder. No puedo ser princesa porque nací guerrera. Odio las bodas, ir de tiendas, las peluquerías y las flores muertas. Leer me salva. Cocino con el corazón, de otra forma no me sale. Sólo veo lo que creo.
Yo siempre te leo aunque no escriba siempre.
ResponderEliminarUn abrazo muy grandote , aunque ahora que lo pienso si te abrazo te aprieto la panzota ! entonces ... muchos mimos y besos para mamá con melón included.
Qué poquito faltaaaaaaa ....
muáaaa !
MC
Hola Esther!
ResponderEliminarPensaba: ¿dónde se ha metido esta mujer?
En fin, ánimos en la recta final. Y sigue informándonos, eh?
Besotes