Ayer hoy y mañana

Me paso mi horoscopo por el conjuntivo. No tengo término medio, o nada de nada, o tengo 3 castings en una semana. Súmale mi horario. Súmale que he de hacer mi visita mínima semanal al Mercadona. Súmale que me paso tres cuartos de hora desayunando, que necesito un rato mínimo de musiquita al día, desplazamientos, peluquería casera, y aderezalo con alguna que otra prueba médica, averías telefónicas y gente impuntual. Me gustaría por un día aburrirme... uf igual tampoco, me he pasado. Aburrirse es un insulto a la vida.
A todo esto se me ocurre la maravillosa y repentina idea de comprarme un antiarrugas contorno de ojos. Es que suena feo hasta el contarlo, pero a alguna region cabroncilla de mi neocortex se le ha ocurrido, y cómo no, tiene que ser para ya. Yo le digo, espera un poco coño, primero se supone que no creo en esas cremas, nunca las he usado, tengo la hidratante de vitese porque mira, he flaqueado ante Nuria Roca, pero bueno, ya me la compraré cuando tenga un poco mas de tiempo; pues no: tiene que ser ya ya ya. A ver si puedo ir al Druni y me deja tranquilita, eso si primero va pasar por la farmacia a por el ferro-gradumet, hay que respetar las prioridades que si le consiento mucho a la region cabroncilla luego se pone tonta. Con un poco de suerte a fin de mes vuelvo a pasar por la farmacia. Saludos ;)

Un letargo de azul,
un eclipse de mar